
Entre los múltiples récords que Donald Trump está batiendo con la formación de su segundo Gobierno hay uno que es probable que nadie le dispute en el futuro: el del gabinete con más milmillonarios de la historia. Está, claro, Elon Musk, su nuevo mejor amigo y el hombre más adinerado del planeta, que esta semana se convirtió en la primera persona cuya fortuna supera los 400.000 millones de dólares (unos 380.000 millones de euros). Pero no solo: entre los nombramientos del presidente electo hay al menos una docena de superricos como él mismo, y unos cuantos ricos, a secas, más. A todos ellos, además del dinero, les emparenta una lealtad a prueba de bomba al líder, que ya alistó a unos cuantos, muchos menos, potentados para su primera Administración.