
La evasión de cinco presos muy violentos ocurrida hace tres meses en la cárcel de Vale de Judeus, en Portugal, resultó un duro golpe para la autoestima del sistema penitenciario del país, pero las sucesivas detenciones de los fugados está reparando en parte la mala imagen de entonces. El georgiano Shergili Farjiani, de 40 años, fue detenido el martes en Padua (Italia), según confirmó en un comunicado la Policía Judicial portuguesa, que destacó la colaboración de las autoridades italianas.